viernes, 28 de septiembre de 2012

THE POWER ON ME


Cuando chica, una vez en el colegio, entre clase y clase, recuerdo que  la profe de literatura nos pidió que  habláramos de las palabras que más nos gustaban y lo que significaban para nosotros; la idea -yo cacho- era decir cosas típicas de chicos y chicas a esa edad. PODEEERRR grité yo desde el fondo de la sala,  y fue la palabra mágica...
No quería  ni los juguetes  de mis compañeritas ni las notas de los mateos, ni la sabiduría de la profesora, ni las casas , ni la pinta, ni los peinados, ni los minos...¡nada!. Lo que anhelaba era PODER.
Mis compañeros de entonces notaron que cuando nombré esa palabrita mi rostro se transformó, era como el de una poseída , Arrrrggg PODER!!...
Cielos, una palabra tan simple pero que encierra un significado tan amplio. Poder, poder, qué cresta quiere decir eso! Para algunos simplemente significa posición  y cosas materiales. Para mi  siempre quiso decir una sola cosa: SUPERIORIDAD TOTAL.

Después noté que lo que había dicho esa lejana tarde escolar no fue tan al azar; el deseo de todo ser humano es tener esa capacidad de imponerse, manipular, gobernar y sentir supremacía por sobre todos los demás sometiéndolos a lo que ellos dicen, su ideal. Eso el el poder entonces... el problema es que ocultan esas ansias . 

La verdad, para ser honesta,  suena raro que una pendeja de doce años haya salido con tamaña locura en ese entonces, pero a esa tierna edad ya soñaba con cosas distintas al resto, fruto tal vez de la timidez, la rabia y la tremenda imaginación .

El cuento es que después de ese **incidente** escolar comenzaron a mirarme de forma rara los compañeros que antes me odiaban y la profesora de básica de ese entonces. no me dirigió más la palabra...
Me sentí PODEROSA. Una verdadera villana.

Con el paso del tiempo, fruto de las obligaciones que la sociedad me impuso; las carreras fomes, los trabajos horripilantes y un sin fin de experiencias nefastas, fui olvidando aquella obsesión infantil  mis pequeñas ansias de poder se esfumaron y fui entrando un poco en el circulo de la vida normal y me debilité...

*A medida que aumentan nuestras fuerzas, nos volvemos más malignos. El débil sufre. El poderoso resiste* ... Hoy muchos años después, me di cuenta del verdadero significado de mi temprana declaración. Poder es lo que necesito para confirmar mi perversidad. punto.

Y creo estar recuperando mis SUPERPODERES...

3 comentarios:

Blood dijo...

El poder no se gana ni se pierde, sólo se transforma. No, no era poder... pero era algo poderoso también, creo.

Blood

Anónimo dijo...

Naciste con voluntad de poder entonces. Nietzchianismo precoz.

LA LOCA DE LA CASA dijo...

El poder tiene múltiples raíces y está en lo que haces, lo que quieres. No era tan pendejada esa respuesta. Si estás logrando lo que quieres ser villana. Tienes el poder. En todo caso yo te encuentro más villana de villa, que de mala. cariños