Fisiculturismo

Me alivia en este momento saber que por fin el universo tiene una explicación; Empezaba a pensar que era yo la rara.

Pero resulta que la física,como todo familiar hincha-pelotas, tiene todas las respuestas. El big bang, los agujeros negros y toda esa inutilidad aparecía de cabra chica los miercoles en el ICARITO y gracias a todo eso mi comprensión de la teoría de la relatividad y de la cuántica tienen un nivel aceptable.

Cómo hubiese podido vivir hasta ahora ignorando que en el universo existen cosas que miden una millonesima de centímetro, y cómo actúa la gravedad?

Hoy en la mañana desperté y, como el universo estaba en expansion, tardé mas de lo habitual en encontrar mi bata y las zapatillas de levantarse. Por ese motivo sali con retraso a mi proyecto de laburo y, como el concepto del tiempo es relativo, el Transantiago tardó mas de la cuenta en pasar y, por consiguiente, llegué mas tarde que la chucha!

Cuando por fin llegué y fui hacia mi "jefe" para explicar la demora, mi masa aumentó conforme aceleraba para acercarme a él, lo que él interpretó como señal de insubordinación.

Tras cruzar un par de palabras de mala gana, me aseguró que me descontarían ese tiempo perdido del sueldito, que en comparación con la veocidad de la luz, es absolutamente más pequeño. La verdad es que si tomamos como refererencia la cantidad de atomos de la galaxia Amdrómeda, en realidad gano poquísimo. Intenté decírselo y juró que si yo cambiaba, consideraría un contrato y aumento.

Al entrar en aquel cuchitril, con la luz del sol entrando a raudales por la ventana, pensé que si de pronto estallaba nuestro gran astro, este pequeño planetita saldría volando de la órbita y yo ya no necesitaría pega ni menos aumento ni niuna weá...

Nos sumergiríamos en algún agujero negro todos juntos para salir nunca jamás. Cool!

Al volver a casa no se me ocurrió nada mas rico que tomar el metro en hora punta... y como venía lleno de cuerpos cargados en reposo, estos empezaron a hacer fuerza entre sí, con el consiguiente aroma producto de la constante fricción entre ellos que me hizo pensar seriamente en bajar lo más pronto posible de ese infiernillo maloliente.

Caminando y respirando -por fin- algo de aire limpio, pensé en la posibilidad de seguir perseverando en mi estado de reposo uniforme y rectilíneo y dedicarme a mi absoluta flojera de una vez por todas. La idea de no permitir que ninguna fuerza externa sea aplicada a mi persona y menos cambiar de estadio por dichas fuerzas, me pareció muy interesante. Me imaginé sin nadie ni nada que me obligara a trabajar seriamente... Je.

Me gustó el punto el anterior: "no ser sometida a ninguna fuerza externa" suena aplicable... Muy aplicable! je.

... Ah! y eso de las fuerzas de fricción o roce de los cuerpos en movimiento... mmmm, me pareció más que tentador, TAMBIÉN!