lunes, 1 de febrero de 2010

SENCILLAMENTE, LAS ODIO.


Yo, personalmente las odio. Pero no es un ''odio'' así, suavecito: las odio con profunda convicción. Es mas, si pudiera las exterminaría del universo, las fumigaría, las haría desaparecer por los siglos de los siglos (o al menos por unos 90 años). Las veo frotarse las manos al momento de arrebatarnos algo y me descomponen. Si yo fuera una personalidad reconocida en el mundo, si yo pudiera manipular pueblos, crearía temerarios ejércitos orientados a aniquilaras. Estoy segura de que muchas mujeres estarían conmigo. Se acabarían las letales pulverizadas con RAID, los gritos histéricos e inesperados y los inventos absurdos como la famosa bolsa de agua colgada en el patio. Estoy segura de que muchas mujeres se unirían a mi ejército para salvar al mundo de estos repugnantes bichos que asechan nuestros cielos y las casas las fatídicas tardes de verano. Por que como si fuera poco soportar el calor sulfúrico, encima hay que andar cuidando de no dejar nada fuera del refri'' por temor a enfrentar a uno de estos miserables bichos de la basura sin el arma mas primitiva y efectiva: EL MATAMOSCAS. Creo que está de más aclarar que un matamoscas siempre es mas efectivo que un aerosol. El matamoscas te permite darle con mayor dirección al golpe, es mas aerodinámica y mas fácil de lavar. Yo, personalmente nunca las mato... Y no por remordimiento o lástima: sencillamente por que me produce un terrible asco hacerlo. Pero he visto a padres/amigos/hermanos/compañeros de trabajo matarlas con rabia y las muy hijas de puta despiden ese horrible aspecto. Osea que incluso después de muertas siguen siendo asquerosas y repugnantes.
Yo quiero utilizar humildemente este espacio que lee casi nadie, para invitar a todos los hombres y mujeres (que tengan el coraje) a unirse a mi ejército ''ANTI-MOSCAS'' y matarlas cada vez que vean a una posarse pérfidamente en los espacios públicos. Y no reaccionar unicamente al grito desesperado de una mujer (u hombre poco hombre). Esto ha sido todo. Muchas gracias.

5 comentarios:

Blood dijo...

Ehh... mmm... uhmmm... ¿te dije que te quería mucho, cierto?

Saludos sangrientos

Blood

Cardito dijo...

Me uno a su ejército, son simplemente repulsivas!
MUERAN LAS MOSCAS!!!
XD

Augusto Scarella dijo...

A ver, estimada colega. Vamos por partes dijo el matarife.
En primer lugar, eso de que el blog no lo lee nadie, es falso. El contador dice otra cosa y la popularidad no dará para que la inviten al fenecido programa El Hormiguero, pero para allá apuntamos, sobre todo en temporada estival.
En segundo lugar, el mosqueo es impresentable, para lo cual me uno a su aborrecimiento y me permito recordarle que una buena corriente de aire, aleja a la epidemia al menos por un rato.
En la tercera posición me atrevo a señalarle que las menciones en escritos de productos específicos, a no ser dinero de por medio, no es práctico. Ese producto que Usted nombra querida colega, es solo uno de las decenas de su tipo, que tristemente debo indicar, solo espantan a los humanos y enferman a los broca chicos (perdón nuevamente: cabros chicos).
Me apuro en afirmar que niuno es efectivo al nivel de los productos que se ofrecen en cualquier super de América del Norte, lo que nos permite concluír, que para variar no estan cag....
Pero, quién sería tan bendito de pedirle a algún afortunado viajero que "traiga una botellita de matamoscas" sin riesgo a ser remachado además de mosqueado, de loco?
Afectuosamente, desde algún lugar de esta zumbida y calurosa capital, su fanclus
Asa
zzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzzz

Unknown dijo...

Oiga mi guacha... si fuera por matar weás repulsivas, que donde se paran la cagan y para las cuales los remedios mulas no funcionan... ya tendríamos que armar un ejército anti-Piñera!!! jejeje

Te apoyo: las moscas al paredón. Ptas las cagás pa asquerosas, oiga! Guácatela!

Besos!

ADF dijo...

mmm?
ke si las odio?
no tanto
al ejercito nunca ..ni de mosquetero
mas bien las admiro, difcilmente encuentro a alguien tan valiente que arriesgan la vida para entrar a semejante mounstrosidad de caverna humana, de gigantes colericos de peligros inimaginables,de maledicencias e insultos inapropiados, y que ademas de cargan la muerte en tan vagos utensilios, o trapos sucios, o diario leidos medias y amarillentos,
a muy pocos he encontrado asi, aunque ultimamente, muchos son los que dan la vida por tan poco,y en cualquier esquina regalan su tiempo por un politico, por na cerveza o trabajan horas de sufrimiento

pero hasta aqui no mas e acompaña la locura de escribir hoy